sábado, 30 de marzo de 2013

ARMONÍA DE LA PALABRA Y EL INSTINTO



Todo fue maravilla de armonías
en el gesto inicial que se nos daba
entre impulsos celestes y telúricos
desde el fondo de amor de nuestras almas.

Hasta el aire espigóse en levedades
cuando caí rendida en tu mirada;
y una palabra, aún virgen en mi vida,
me golpeó el corazón, y se hizo llama
en el río de emoción que recibía,
y en la flor de ilusión que te entregaba.
Un connubio de nuevas sensaciones
elevaron en luz mi madrugada.
Suaves olas me alzaron la conciencia
hasta la playa azul de tu mañana,
y la carne fue haciéndose silueta
a la vista de mi alma libertada.
Como un grito integral, suave y profundo
estalló de mis labios la palabra;
Nunca tuvo mi boca mas sonrisas,
ni hubo nunca más vuelo en mi garganta!
En mi suave palabra, enternecida,
me hice toda en tu vida y en tu alma;
y fui grito impensado atravesando
las paredes del tiempo que me ataba;
y fui brote espontáneo del instante;
y fui estrella en tus brazos derramada.
Me di toda, y fundiéndome por siempre
en la armonía sensual que tu me dabas;
y la rosa emotiva que se abría
en el tallo verbal de mi palabra,
uno a uno fue dándote sus pétalos,
mientras nuestros instintos se besaban.

JULIA DE BURGOS

lunes, 25 de marzo de 2013

LA PASIÓN DE CRISTO

La Pasión del Señor y su gloriosa Resurrección iluminan todo el año litúrgico con su resplandor de virtud, gracia y salvación. Comenzado con el Adviento, el año litúrgico prosigue con el período de Navidad. Luego se intercalan unos domingos del tiempo ordinario, para remontar de nuevo hacia los grandes misterios de la vida de Jesús en la cuaresma, triduo santo y período pascual. La Iglesia, con sabiduría secular, ha colocado la liturgia cuaresmal y pascual al final del invierno e inicio de la primavera. La misma naturaleza, de este modo, acompaña al cristiano en el proceso de su muerte al pecado, llevando con Jesucristo la propia cruz hasta el Gólgota, y en la floración de la nueva vida en Cristo, por la participación en los frutos de su Resurrección gloriosa. El ritmo del tiempo y la escansión de las estaciones se entrelazan fraternalmente en beneficio del hombre, de su felicidad y de su destino.

En el conjunto del año litúrgico, la Pasión de Jesucristo representa el momento culminante y por excelencia dramático de toda la historia de Jesús de Nazaret. Toda la vida del Nazareno se encamina, con paso a veces lento, a veces acelerado, hacia Getsemaní y el Calvario. Digamos que la Pasión es la culminación de un designio, de una misión. Su contexto natural es la vida entera de Jesús de Nazaret. Consideramos que una reflexión orante y agradecida sobre este misterio insondable de nuestra fe puede deshacer con su intensa luz ciertos vahos y tinieblas de desencanto y pesimismo, que pululan por no pocas conciencias de los hombres de hoy.


El evangelio quadriforme de la Pasión

Los acontecimientos a través de los que se desarrolló la Pasión de Jesús de Nazaret son históricamente únicos e irrepetibles. Se realizaron en la ciudad de Jerusalén y sus alrededores, en tiempos de Tiberio, emperador romano, bajo Poncio Pilatos, gobernador de Judea, siendo Caifás sumo sacerdote. Estas coordenadas espacio-temporales nunca más volverán a juntarse en la historia. Tales eventos constituyen el único y dramático Evangelio de la Pasión del Señor, es decir, la única Buena Nueva de nuestra salvación, manantial de alegría y conforto para los hombres pecadores.

Este único Evangelio de la Pasión ha sido relatado, según los textos canónicos del Nuevo Testamento, por cuatro evangelistas. Son muchos los episodios en que coinciden los cuatro, pero no faltan episodios que a cada uno les son propios. Y en las mismas escenas comunes a los cuatro, ¡cuántas pequeñas diferencias en los detalles circunstanciales! Ninguno de los cuatro evangelistas estuvo presente en todos y cada uno de los acontecimientos. Ninguno quiso narrarlos como una crónica periodística con puntos y comas. Ninguno pretendió satisfacer la curiosidad de los lectores o suscitar en ellos meros sentimientos humanos. Narraban con corazón creyente. Contaban lo que habían visto y oído, no como simples eventos, sino como una cifra misteriosa del lenguaje de Dios Padre y Redentor, enviada a los hombres ganados para la fe en Jesucristo. Son Evangelio en los acontecimientos y por medio de ellos, en virtud y por fuerza de la fe que en ellos descubre la salvación de Dios, encarnada en la persona del dolorido y sangrante Nazareno.

Los Evangelistas relatan, cada uno con su plan, con su estilo y con su personalidad, las horas más densas en la historia y vida de la familia humana, las más profundas y apasionadas, las más trágicas y convulsas, las más grandiosas y entrañables, las más inolvidables y heroicas, las más necesarias para arrancar al hombre de sí mismo y trasplantarlo hasta Dios. Se quedan cortos, muy cortos, porque el misterio guarda una enorme distancia de todo decir humano. Balbucean, cuentan, tartamudean la verdad sagrada, divina, de muchos hechos comunes en aquellos años; hechos tantas veces repetidos en el pretorio, por las calles de Jerusalén y en la cumbre de la colina de la Calavera. Ésta es la condición y el destino de los escritos humanos, incluso cuando están inspirados, como los evangelios, por el Espíritu Santo.

Los hechos narrados en los evangelios corresponden a acontecimientos reales. Pero no todos los hechos de la Pasión nos han sido narrados. Éstos trascienden y sobrepasan en sí cualquier relato. Además, toda narración selecciona, recrea, moldea los hechos en un lenguaje, en una forma expresiva, en una mentalidad y cultura. Los relatos de la Pasión no son de ninguna manera reportajes. Entre la objetividad del hecho y la realidad del relato está de por medio cada evangelista. Ellos son conscientes de contar hechos históricos, pero más todavía acontecimientos salvíficos. El resultado es la narración de una historia, penetrada por la fe, expresada por la fe, aceptada y vivida en la fe. ¡La luz de la Pascua ha hecho ver la Pasión de Jesús con ojos nuevos!

Los evangelios de la Pasión, ante tanta inhumanidad que se agolpa sobre Jesucristo en unas cuantas horas, son sobrios, muy discretos. Han proferido pocas palabras para que el Espíritu hable a través del texto. Son muchas las escenas que se siguen una detrás de otra, pero parece que los evangelistas no quieren detenerse en ninguna. Pasan sobre los hechos del drama con candor de neófitos, deslumbrados por la Resurrección. Estaban convencidos, por la fe en el Resucitado, de que una sola gota de sangre del Redentor hubiera sido suficiente para salvar al mundo. No son las llagas en sí lo que nos salva, sino la fidelidad suprema, hasta las llagas, al designio del Padre, el amor a su Voluntad soberana y santísima.

En verdad hemos de confesar que lo más importante de la Pasión: el dolor de Dios, la fidelidad al plan de salvación, el amor infinito al Padre, se nos escapa como agua en cesta de mimbres. Algo del agua se retiene, pues las mimbres quedan mojadas, pero la mayor parte se escurre y desaparece en la corriente. ¿Quién puede entrar en el alma de Jesús durante la Pasión? ¿Quién puede escrutar su corazón en esas horas terribles? ¿Quién puede adecuadamente entrever el corazón del Padre, la actitud del Espíritu Santo ante el drama sublime de la Pasión? La Pasión de Jesús son hechos vivos y episodios reales, son historia y misterio. Se trata de algo inaudito, supramental: la Pasión de Dios en el hombre Jesús. Los evangelistas los cuentan para que lleguen por los ojos y los oídos hasta la interioridad del hombre, allí donde el misterio tiene su nido. Por eso, la Pasión de Cristo más cálida, más significativa, de mayor hondura, es la que recrea y revive cada cristiano en su corazón, al socaire del Espíritu.

viernes, 22 de marzo de 2013

ALMA DESNUDA

Soy un alma desnuda en estos versos,
Alma desnuda que angustiada y sola
Va dejando sus pétalos dispersos.

Alma que puede ser una amapola,
Que puede ser un lirio, una violeta,
Un peñasco, una selva y una ola.

Alma que como el viento vaga inquieta
Y ruge cuando está sobre los mares,
Y duerme dulcemente en una grieta.

Alma que adora sobre sus altares,
Dioses que no se bajan a cegarla;
Alma que no conoce valladares.

Alma que fuera fácil dominarla
Con sólo un corazón que se partiera
Para en su sangre cálida regarla.

Alma que cuando está en la primavera
Dice al invierno que demora: vuelve,
Caiga tu nieve sobre la pradera.

Alma que cuando nieva se disuelve
En tristezas, clamando por las rosas
con que la primavera nos envuelve.

Alma que a ratos suelta mariposas
A campo abierto, sin fijar distancia,
Y les dice: libad sobre las cosas.

Alma que ha de morir de una fragancia
De un suspiro, de un verso en que se ruega,
Sin perder, a poderlo, su elegancia.

Alma que nada sabe y todo niega
Y negando lo bueno el bien propicia
Porque es negando como más se entrega.

Alma que suele haber como delicia
Palpar las almas, despreciar la huella,
Y sentir en la mano una caricia.

Alma que siempre disconforme de ella,
Como los vientos vaga, corre y gira;
Alma que sangra y sin cesar delira
Por ser el buque en marcha de la estrella.



ALFONSINA STORNI

EN SOLEDAD...



¿Quién no se ha tumbado nunca en la cama un rato a perder el tiempo cuando tienes mucho que hacer? simplemente para pensar, llorar, esperar una llamada, poner en orden todos los pensamientos que acechan tu mente a mil por hora...Mirar a un punto fijo en silencio y visualizar ahí todas tus esperanzas y todos tus sueños. Le has dicho a todo el mundo que quieres estar solo, que no quieres ver a nadie; pero tú sabes que es mentira, nadie quiere estar sólo, el problema viene cuando sólo quieres estar con una persona y esa persona no está a tu lado…

lunes, 18 de marzo de 2013

19 MARZO SAN JOSÉ - ORIGEN Y CURIOSIDADES



La tradición en el culto a San José tardó en tomar fuerza dentro del mundo cristiano, a pesar de ser el padre elegido para Jesús. El motivo más probable es que en sus orígenes los cristianos sólo rendían algún tipo de culto a los mártires y no era el caso de San José.
En los principios del siglo IV ya comenzaba a aparecer el culto a San José entre los Coptos, apareciendo su festividad en el día 20 de julio del calendario Copto.
En el mundo occidental aparecen las primeras referencias a su culto en el año 1129 donde se encuentra una Iglesia dedicada a su nombre en Bolonia.
Los padres Carmelitas fueron los primeros en trasladar su culto desde Oriente hasta Occidente de una manera completa y tras su aparición en el calendario Dominico fue ganando cada vez más fuerza.
Durante los años posteriores, grandes personalidades que después fueron santos, en algunos de los casos, tuvieron una gran devoción por San José, lo que hizo que su culto tomase más fuerza. Es significativa la aportación de Jehan Charlier Gerson que en 1400 compuso un Oficio de los Esponsales de San José.
En el pontificado de Sixto IV, San José fue introducido en el calendario romano, que es el que ha llegado hasta nuestros días, en el día del 19 de marzo.
Esto fue fundamental y a partir de ese momento se convirtió en fiesta simple, pasando a fiesta doble por Inocencio VIII, fiesta doble de segunda clase por Clemente XI. Finalmente Pío IX le nombró patrono de la Iglesia Católica. También entre los obreros ganó mucha popularidad durante el siglo XIX. De hecho Pío XII instauró la fiesta de San José Obrero el día 1 de mayo, el día del trabajo.
Curiosidades:
  • El motivo de que su día también se celebra el día del padre es el carácter que se le da a San José como buen padre y protector.
  • En América sin embargo, se celebra el tercer domingo de junio debido a que Sonora Dodd una mujer estadounidense vio en su padre un referente de valor, cariño y sacrificio ya que enviudó mientras su mujer daba a luz a su sexto hijo. Tras ello él sólo sacó adelante a toda la familia en una granja. Por este motivo, Sonora Dodd propuso celebrar el día 19 de junio, fecha del nacimiento de su padre, una festividad en honor a los padres. En el año 1924 el presidente Calvin Coolidge lo convirtió en celebración nacional. Finalmente en el 66 Lyndon Johnson proclamó el tercer domingo de junio día oficial del padre en todos los EEUU. Esta fecha fue adoptada por la mayoría de los países del continente.
  • Es típico representar a San José como un hombre mayor y con un cayado del que nacen flores en su extremo. Esto es debido a las diversas leyendas que puedes conocer en la vida de San José.
  • Los Pepes. El motivo de que a las personas con nombre José se les conozca también como Pepe, es que, al no ser el padre biológico de Jesús era por tanto su padre putativo, y en las diversas pinturas, esculturas o al leer algo en las escrituras sobre él, se añadía tras su nombre las iniciales PP (padre putativo).

domingo, 17 de marzo de 2013

LA ÚLTIMA CENA - LEONARDO DA VINCI



¿Sabías que?

Leonardo Da Vinci tardó siete años en finalizar su obra titulada "La Ultima Cena". Las figuras que representan a los 12 apóstoles y a Jesús fueron tomadas de personas reales. Se dice que cuando se supo que pintaría esa obra, muchos jóvenes se presentaron para ser seleccionados. Tras algunos meses de búsqueda seleccionó a un joven de 19 años de edad como modelo para pintar la figura de Jesús. Durante seis meses trabajó pintando al personaje principal. Durante los seis años siguientes continuó su obra buscando y representando a 11 apóstoles; dejando para el final a aquel que representaría a Judas. Le costó semanas encontrar a un hombre con una expresión dura y fría. Un rostro que identificaría a una persona que sin duda traicionaría a su mejor amigo. Llegó a sus oídos que un hombre reunía estas características y que estaba encerrado en un calabozo de Roma sentenciado a muerte por robo y asesinato. Con un permiso, el prisionero fue trasladado a Milán. Durante meses este hombre se sentó silenciosamente frente al artista. Cuando Leonardo dió el último trazo a su obra se volvió a los guardias del prisionero y les dió la orden de que se lo llevaran. Cuando salían del recinto el prisionero se soltó y corrió hacia Leonardo gritando:
- Obsérvame! ¿No reconoces quién soy?
Da Vinci lo miró cuidadosamente y respondió:
-Nunca te había visto en mi vida, hasta aquella tarde en el calabozo de Roma.
Llorando y pidiendo perdón a Dios el reo le dijo:
-"Maestro, yo soy aquel joven que usted escogió para representar a Jesús en este mismo cuadro".

SERGIO DALMA - BAILANDO CON ANA


martes, 12 de marzo de 2013

SOLA


Sola en mi soledad, y mientras estoy sola, intento buscarte sin encontrarte.
Sola por querer estar sola, sola por no tener a nadie, sola por querer amarte.
Soledad que vive en mi y sintiéndome en soledad... te miro y... no estoy sola. 

NIKA

TU LUZ



Nada es blanco. Nada es negro…

Solo tu ser da color a nuestro encuentro, a nuestro deseo… a todo lo que me aportas y lo que te entrego.

No hay razón ni entendimiento, solo un beso tuyo apaga la sed que por ti tengo.

Le das luz a mis días y fuego a mis sentimientos.
Tienes misterio y chispa, me envuelves en tu velo.

Eres el amuleto y el talismán que yo necesito para poder respirar, el que me protege como un guerrero y me da vida sin más.

NIKA

RECUERDA QUE...

Hay tristezas que son como el cauce de los ríos, se deslizan suaves y bajan por tu vida sin detenerse ante los obstáculos, para luego desembocar en las playas de tu futura alegría.

Cuando notas que tu mirada pierde el brillo como el atardecer, recuerda que al llegar la mañana, el sol hará que tu hoy sea el inicio de algo totalmente nuevo. Espera el mañana con la cabeza bien erguida.

Continúa simpatizando con la vida aún cuando el sol no brille.

Todos los sinsabores que pudiste percibir en la vida, tienen como finalidad que recuerdes que aún te queda el sentido del gusto para diferenciar lo bueno de lo malo.

Sólo se vive un día a la vez, por eso, por mucha prisa que tengas tendrás que esperar 24 horas para ver el mañana.

¡¡Cuánto amor hay en el cielo para ti!!

La vida es un lujo, es el gusto de lo exquisito por mantener un pie frente al otro. Sí, la vida es un lujo; lujo para amar, para respirar, para soñar y para ser feliz. Por eso no te la guardes sólo para ti, gástala como si fueras millonario.

Que tu sonrisa sea parecida a la de los niños cuando se saben amados, y que logres ver en este día que naciste para recibir una caricia en cada uno de tus latidos, que te des el gusto de perfumar tu boca con palabras llenas del aroma de tu interior, y que la paz que rodea el paternal corazón de Dios sea la que te mantenga saturado de tranquilidad en este tu único día que te corresponde vivir hoy.

“Estar vivo es uno de los regalos más hermosos que podrás mantener tanto en tu espíritu como en tu alma. Por eso, manifiesta tu viveza en todo lo que haces, ríe como si fuera la última vez, sueña como los niños y haz de ti un ser que vive para hacer feliz a los demás”

miércoles, 6 de marzo de 2013

BESOS

Hay besos que pronuncian por sí solos
la sentencia de amor condenatoria,
hay besos que se dan con la mirada
hay besos que se dan con la memoria.

Hay besos silenciosos, besos nobles
hay besos enigmáticos, sinceros
hay besos que se dan sólo las almas
hay besos por prohibidos, verdaderos.

Hay besos que calcinan y que hieren,
hay besos que arrebatan los sentidos,
hay besos misteriosos que han dejado
mil sueños errantes y perdidos.

Hay besos problemáticos que encierran
una clave que nadie ha descifrado,
hay besos que engendran la tragedia
cuantas rosas en broche han deshojado.


Hay besos perfumados, besos tibios
que palpitan en íntimos anhelos,
hay besos que en los labios dejan huellas
como un campo de sol entre dos hielos.

Hay besos que parecen azucenas
por sublimes, ingenuos y por puros,
hay besos traicioneros y cobardes,
hay besos maldecidos y perjuros.

Judas besa a Jesús y deja impresa
en su rostro de Dios, la felonía,
mientras la Magdalena con sus besos
fortifica piadosa su agonía.

Desde entonces en los besos palpita
el amor, la traición y los dolores,
en las bodas humanas se parecen
a la brisa que juega con las flores.

Hay besos que producen desvaríos
de amorosa pasión ardiente y loca,
tú los conoces bien son besos míos
inventados por mí, para tu boca.

Besos de llama que en rastro impreso
llevan los surcos de un amor vedado,
besos de tempestad, salvajes besos
que solo nuestros labios han probado.

¿Te acuerdas del primero...? Indefinible;
cubrió tu faz de cárdenos sonrojos
y en los espasmos de emoción terrible,
llenaron sé de lágrimas tus ojos.

¿Te acuerdas que una tarde en loco exceso
te vi celoso imaginando agravios,
te suspendí en mis brazos... vibró un beso,
y qué viste después...? Sangre en mis labios.

Yo te enseñe a besar: los besos fríos
son de impasible corazón de roca,
yo te enseñé a besar con besos míos
inventados por mí, para tu boca.


GABRIELA MISTRAL